Si miramos hacia atrás en el tiempo cuando se empezaron a hacer los primeros calendarios, veríamos que se llevan usando desde hace más de 2000 años.
Esto quiere decir que la gente descubrió hace miles de años las estaciones y el tiempo. Se dieron cuenta de que afectaban a su vida diaria, ya sea en las cosechas, en la caza, etc., es decir, que las estaciones jugaban un papel muy importante en su supervivencia.
Con el tiempo los calendarios se perfeccionaron hasta que en el año 1582 se empezó a usar el calendario que conocemos y usamos hoy en día, el gregoriano.
Hoy queremos hablaros sobre que papel juega el calendario en el trabajo diario, además de en nuestra vida personal.
ESTAMOS MÁS CONCENTRADOS EN NUESTRO TRABAJO
Por mucha tecnología que tengamos hoy en día, el calendario de mesa personalizado sigue jugando un papel muy importante en nuestro trabajo y nos ayuda a concentrarnos. También hace que seamos más productivos y centrarnos en las tareas importantes. Cuando usamos un calendario programamos el trabajo diario y eso hace que evitemos distraernos aunque tengamos interrupciones constantes.
NOS AYUDA APRIORIZAR LAS TAREAS
Otro papel fundamental del calendario es ayudarnos a priorizar en nuestro trabajo y guiarnos sobre qué debemos hacer en primer lugar. Si no se priorizan las tareas podemos perder mucho tiempo y eso se traduce en una sola palabra: pérdidas económicas.
No hay nada como terminar tu jornada laboral con todo el trabajo hecho y de nuevo un calendario será la herramienta que te permita conseguirlo.
NOS RECUERDAN QUE DEBEMOS DESCANSAR
No todo va a ser trabajo ¿verdad?. Los calendarios también nos recuerdan que debemos hacer pausas, ya que si no hay descansos uno deja de ser productivo.
La verdad es que estamos tan metidos en nuestro trabajo que muchos días se nos olvida la importancia del tiempo libre para el ocio. Puede parecer una obviedad, pero para ser eficaz y sentirse bien es obligado hacer una parada diaria.
NOS HACE SER MÁS PRODUCTIVOS
La máxima productividad y el orden son las claves más importantes de cualquier trabajo o negocio. En este sentido, los calendarios nos pueden ayudar de dos formas.
En primer lugar, un calendario nos crea una rutina en nuestro día a día. Por ejemplo, nos solemos levantar a la misma hora todos los días y hacemos nuestros rituales antes de ir a trabajar.
Cuando llegamos al trabajo también suele haber una pauta de comportamiento muy parecida. Encientes el ordenador, revisas los correos electrónicos y te quitas en primer lugar lo más importante.
Para muchos el calendario en este sentido es fundamental, ya que nos ayuda a organizar las franjas horarias del día y esquematizar todo el trabajo pendiente.
La segunda forma de usar un calendario para ser más productivo es ir tachando de la lista todas las tareas diarias que tenemos. Este método te asegura que terminarás antes los trabajos pendientes más importantes. Si no tienes un calendario al final se te acaban acumulando tareas y lo sabes…
No cabe ninguna duda de que los calendarios con notas llevan mucho tiempo usándose y eso es por algún motivo. Si te gusta ser una persona organizada y que te cunda el trabajo, tu vida pasa por tener en tu mesa un calendario.